Hace un año asistí una
conferencia extraordinariamente dirigida por el ponente Marcos Urarte donde nos
hacía reflexionar como ser feliz en el trabajo, pero también de que toda
felicidad produce productividad. Para ello, decía que tenemos que hacer algunos
pequeños cambios en nuestros procesos y especialmente en nuestra actitud, es
decir, si cambiábamos la forma de hacer
las cosas creando una cultura enfocándose en hace sentir bien a la gente se
incrementará el rendimiento laboral. Para nadie es un secreto que si vamos a
trabajar en un ambiente de armonía, bienestar y felicidad, nuestro trabajo lo
haremos mejor y con entusiasmo, porque nos contagiamos del entorno que está
dentro de nuestra empresa, a pesar de que podamos tener alguna situación
personal.
No obstante, la pregunta que
nos viene a la mente es: Cómo lograr una cultura de felicidad para que podamos
ser productivos? La clave está que para conseguir grandes resultados los
líderes deben considerar los pequeños detalles, como lo expuso Marcos Urarte:
·
Los cambios que se hagan para mejorar un puesto de trabajo
dependen de la mejora continua.
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No hay nada peor que engañar a la gente. Debemos ser
coherentes, con lo que decimos, escribimos y hacemos. Si no podemos cumplirlo
es mejor no decirlo.
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Debemos dar 5 feed back positivos por un feed back
negativo.
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No culpes a los demás acepta tu responsabilidad personal.
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En un equipo de trabajo el aporte pequeño de uno solo
puede contribuir el éxito de un equipo.
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Usar factores motivadores siempre que se pueda:
flexibilidad en los horarios, reconocimiento moral y salarial, escuchar a la
gente en temas no solo laborales sino personales, conseguir zonas de confort,
etc.
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Ser un buen líder: centrándose en las cosas grandes y
pequeñas, siendo estratega, gestor de buenas relaciones, desarrollador de talentos y generador de una atmósfera
agradable de trabajo.
En el Día Mundial de la
Felicidad les deseo a todos a mis familiares, amigos y colaboradores que
disfruten la vida cada instante, porque recuerden que los pequeños detalles
cuentan y más si nos hacen felices y nos traen bienestar. Fomentar la felicidad
favorecerá la productividad!
Un abrazo!